Categorías
General Psicología del deporte

Corredor: momento de parar, momento de aprender

Momento de parar, momento de aprender.

En estos momentos diferentes en los que hemos de cambiar nuestros hábitos, rutinas e incluso nuestros objetivos y metas deportivas marcadas, es un gran momento para aprender, adquirir o entrenar nuevas capacidades.

En ocasiones se nos presentan determinados acontecimiento que se escapan de nuestro control y que nos generan incertidumbre y frustración en muchos momentos, ya que estamos acostumbrados a tener nuestra vida bajo control y completamente organizada.

Nos presentamos ante un momento diferente, novedoso, lleno de incertidumbre pero a la vez lleno de oportunidades. En un entorno lleno de estímulos y situaciones anómalas para nuestra mente.

Es esta la mejor manera de construir una mente fuerte y resiliente, entrenando nuestra inteligencia emocional y adquiriendo nuevas habilidades que nos ayudarán en la vida y a nivel deportivo una vez haya pasado esta situación.

Te enfrentas a cambios de rutinas de entrenos, cancelaciones de pruebas, estrés debido a la situación, desánimo o frustración por tanta incertidumbre y falta de objetivos alcanzables.

Te propongo que, al igual que tantas veces has hecho, tomes el control de la situación con ilusión y determinación. Voy a plantearte una serie de tips o consejos que pueden ayudarte a utilizar estos momentos, aparentemente difíciles, en oportunidades y en un aumento de tu confianza personal.

Es momento de mirar más allá de lo que NO está sucediendo y comenzar a mirar a lo que puede llegar a suceder. Se trata de crear una nueva realidad que no estaba en tus planes como nuevos entrenos, nuevos objetivos y metas, etc.

Lo primero y más importante es que relativices la situación, tomes perspectiva y hagas un análisis de tu estado actual de forma con tus debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades, lo que es un DAFO de toda la vida.

Puedes escribir en una hoja en blanco, dando principal importancia a tus fortalezas y oportunidades. Si dispones de un entrenador, puedes realizarlo junto a él/ella para que tengas una visión más global y real de tu situación personal.

Hazte las siguiente pregunta ¿Qué tiene de positiva esta situación? ¿Gracias a qué, yo puedo mejorar en estos días? ¿Qué puedo aprovechar en mi beneficio en estos momentos? ¿Cómo me sentiría si esta fuera realmente una oportunidad para mejorar?

Completa estas Frases:
Gracias a todo lo que está pasando……
Ahora es momento para……….. ya que antes no he podido hacerlo.
Voy a aprovechar este momento para ……..
Debido a la situación he tenido que ………… y gracias a ello ahora voy a ………….

Como ves, es importante abrir la mente y enfocar en las posibilidades que nos brinda esta situación, mirando siempre con optimismo y construyendo con ilusión y automotivación. Emocionalmente te estarás enfrentando a 2 emociones principalmente, la ira y la tristeza.

La ira viene originada por la frustración, y esta por la expectativa no cumplida. De forma que cuando no se cumplen nuestras expectativas, tal y como las habíamos visualizado nos inunda la frustración,y es la frustración la principal causa de ira, enojo o rabia.

Conociendo este proceso, podemos ir al origen del mismo y cambiar la expectativa, de manera que si la expectativa nueva SÍ puede ser cumplida, nuestra sensación de frustración desaparece y con ella la emoción de IRA. Por ejemplo: Llevo entrenando 16 semanas para la Maratón de Madrid y la han cancelado. Puse toda mi ilusión y esfuerzo en esta prueba, yo esperaba y deseaba poder correrla, EXPECTATIVA.

Al darte cuenta que no se podrá cumplir tu expectativa, seguramente te frustrarás y esto te hará sentir rabia, ira, enojo… De igual manera, si te lesionas antes de una carrera, la emoción podría ser la misma, a diferencia de que en una lesión podemos caer en la culpabilidad y en este caso actual NO podemos culpar a nadie por el Covid19, por ejemplo. Por lo que llegaría la indignación, frustración, etc.

Solución:

Cambiar el foco, crear una nueva expectativa, construir un nuevo futuro mental, objetivos y metas nuevas.

Este proceso lo puedes hacer con tu entrenador, tus compañeros de entreno o con tu familia. Es necesario que construyas y que lo cuentes, que lo hagas real. Haz ver a tu mente que tus expectativas están vivas y que hay razones para motivarse y programar
sesiones de entreno de nuevo

  1. Aléjate de los pensamientos que te lleven a lo que no puede ser, ese plan ya no es tu plan. Hazte a la idea, y así házselo saber a tu mente, de que hay un nuevo plan y que es mejor que el anterior, porque tienes más tiempo para prepararlo y más experiencia.
  2. Elige un nuevo plan realmente motivador, realista y sobre todo retador, con el toque justo de dificultad para que sea alcanzable y a la vez te veas capaz de conseguirlo.
  3. Una vez hemos cambiado la expectativa y tenemos nuevos propósitos observa como te sientes, qué emoción predomina en tu cuerpo y que pensamientos te acompañan.
  4. Todo dependerá de cuánto tiempo dediques a pensar en el nuevo objetivo o cuánto tiempo estás dedicando a pensar en tu anterior objetivo, esto marcará tu estado emocional y condicionará tus entrenamientos al condicionar tu motivación intrínseca.

En el caso de la Tristeza, emoción que viene causada por la sensación o percepción de pérdida, las sensaciones cambiar y los pensamientos recurrentes suelen ser más pesimistas. La TRISTEZA es una emoción depresora, mientras que la IRA es una emoción activadora por lo que las sensaciones, sentimientos y pensamientos son muy distintos.

También puede ocurrir que vayamos de una a otra emoción, creando momentos de desequilibrio emocional. Esto es normal, al ser la experiencia emocional un factor subjetivo que se retroalimenta de sus propios procesos. El proceso de la tristeza es parecido al de la IRA pero, en vez de generar acción y lucha, provoca evasión y una sensación de inferioridad, debido a la sensación de no tener la
situación bajo control y haber “perdido” el poder de la misma.

La tristeza se relaciona con la “pérdida” o la sensación de pérdida, en el ejemplo anterior creemos que hemos perdido la oportunidad de competir, nuestro sueño, la experiencia o cualquiera que sea la lectura de nuestra mente. La realidad es que no hemos perdido nada, ya que nada teníamos. Para nuestra mente se genera un vació en el futuro por ese acontecimiento que ya no podrá hacerse realidad y genera una sensación de pérdida.

La tristeza nos lleva a estados de baja actividad o Arousal, que nos harán sentir cansados y con desánimo, esta sensación es completamente subjetiva ya que viene condicionada por el estado emocional. Sepárate de la emoción.

Para revertir la situación, podemos utilizar la misma técnica que con la IRA, cambiando la expectativa y construyendo un nuevo futuro que rellene ese vació que se ha generado por la “pérdida” de las expectativas que no se podrán cumplir.

De la misma forma, cuanto más tiempo dediquemos a planificar, pensar, comentar, compartir en redes nuestros nuevos retos, más real se hará para nuestra mente y esta no tendrá espacio para rellenar nuestro tiempo con pensamientos pesimistas o negativos.

La ira puede ser una buena compañera en los entrenos si la gestionamos adecuadamente, pero la tristeza es un lastre que nos desgastará poco a poco. Si puedes transformar la tristeza en rabia, siempre controlada, es una buena forma de crear acción y no entrar en la pesadez y la lentitud de la tristeza y las emociones menos activas a nivel de Arousal.

Estas son principalmente las emociones con las que te vas a encontrar, ya que el MIEDO siempre nos acompaña y va a generar alguna de las dos vistas. Con respecto a la AVERSIÓN o comúnmente llamada ASCO puede generar desánimo o un pensamiento de tirar la toalla o no encontrar sentido a tanto esfuerzo, en este caso vuelve a conectar con tu propósito, tus valores, para qué corres, qué o cómo te hace sentir este deporte.

En ocasiones, según la intensidad emocional, es necesario parar para tomar perspectiva y distancia y tomar oxígeno. La no acción, el silencio, son necesarios en nuestra vida ya que crean equilibrio y reestructuran nuestra percepción de la vida.

La práctica de Meditación, Yoga, Tai Chi pueden ayudarte a equilibrar tu mundo emocional y poder ver con claridad esta situación, tomando decisiones más acertadas cada día. Aprovecha las situaciones difíciles para salir reforzado/a.

Alberto Escobar Dorado
Coach Experto en IE y PNL
Profesor de Yoga
Técnico Deportivo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.