El dolor de costado puede aliviarse. La elección correcta de las bebidas y su cantidad también desempeñan un papel importante.
Autor : Roberto Llano, MD, Especialista en Medicina Interna General FMH, Medicina Deportiva SGSM, Jefe de Medbase Bern Westside
Aproximadamente uno de cada cinco corredores la padece durante una carrera, pero su origen ha desconcertado a los médicos desde la antigüedad. De hecho, en cuanto quieren echarle un vistazo más de cerca, la molesta dolencia ya ha vuelto a desaparecer. Por lo tanto, hay poca evidencia científica sobre el dolor de costado. Sin embargo, lo que es seguro es que el dolor punzante, a veces descrito como sordo o tirante, es inofensivo. Esto se detiene rápidamente tan pronto como el atleta toma un descanso pero puede costar un valioso tiempo de carrera.
El erudito romano Plinio el Viejo ya había descrito lo que ahora se llama «ETAP», o «dolor abdominal transitorio relacionado con el ejercicio». Al contrario de lo que sugiere su nombre, el dolor de costado también puede ocurrir en el centro del abdomen. Sin embargo, generalmente se siente en la parte media o superior del abdomen, con mayor frecuencia a los lados.
Los deportistas de resistencia son los más afectados
Son principalmente los deportistas de resistencia los que padecen este dolor, especialmente si practican deportes que implican sacudidas regulares del cuerpo y/o movimientos de rotación del tronco, como correr, montar a caballo o jugar al baloncesto. Las vibraciones por sí solas no pueden ser la causa porque incluso los nadadores a menudo se quejan de dolor lateral. Los atletas de fuerza generalmente se salvan de esta molestia.
Por lo tanto, cualquier persona que sufra a menudo dolor en el costado debe entrenar principalmente la estabilidad del núcleo (core). Un cinturón de soporte para el tronco también puede ayudar a reducir la movilidad del tronco y disminuir la aparición de molestias laterales.
La experiencia alivia el problema
Los niños, adolescentes y adultos jóvenes tienen más probabilidades de sufrir ‘ETAP’ que las personas mayores. Por esta razón, el autor de un artículo profesional dio una vez un consejo (no en serio) para el tratamiento: «envejecer».
Sin embargo, lo que se puede hacer más rápido es entrenar porque el problema se puede eliminar, al menos en parte. Los atletas sin experiencia o sin entrenamiento se ven afectados con más frecuencia que los bien entrenados, y los atletas competitivos rara vez sufren de ‘ETAP’.
¿Cuales son las causas?
Hay muchas teorías diferentes sobre el origen de este dolor. Algunas de ellas parecen bastante divertidas desde el punto de vista actual: una «debilidad constitucional» o una «respiración antinatural», por ejemplo, fueron las causas encontradas por los médicos del pasado. Sin embargo, las pruebas de función pulmonar han demostrado que ni el volumen pulmonar ni otros valores respiratorios patológicos se ven afectados en el caso de dolores laterales. También se han sugerido como causas la estasis de sangre en el hígado o el bazo o los espasmos de los músculos pequeños entre las costillas, pero probablemente sean tan infundados como la hipótesis del espasmo diafragmático debido a una alteración circulatoria.
Es muy probable que sean las asas intestinales llenas las que desencadenen el dolor. Causan irritación mecánica del peritoneo que se encuentra como un tejido delgado sobre el estómago, los intestinos y otros órganos de la cavidad abdominal. Esta hipótesis está respaldada por el hecho de que las punzadas laterales a menudo ocurren cuando los atletas han comido o bebido antes del entrenamiento. En particular, los líquidos hipertónicos y ricos en carbohidratos, como los jugos de frutas elaborados con concentrados de jugo parecen promover el dolor.
¿Qué se puede hacer?
Si eres propenso a sufrir dolores en los costados, lo mejor es no ingerir grandes cantidades de líquido dos o tres horas antes de un entrenamiento o una competición y evitar las bebidas hipertónicas. Si experimenta una punzada en el costado, es útil respirar profundamente, disminuir el ritmo, aplicar una presión suave en la espalda en el área adolorida con la mano, inclinarse hacia adelante o estirar el torso. La forma más rápida de deshacerse del dolor es dejar de hacer ejercicio brevemente hasta que desaparezca el dolor.
Sugerencias
- Fortalecer los músculos abdominales, por ejemplo con abdominales diarios.
- Fortalece tus músculos centrales, por ejemplo, con ejercicios de apoyo para el antebrazo y la cadera.
- No te excedas y aumenta gradualmente la velocidad y la intensidad de tus entrenamientos.
- Si el dolor no se alivia rápidamente a pesar de dejar de hacer ejercicio puede haber otro problema de salud (posiblemente grave), como una hemorragia gastrointestinal o un ataque al corazón.
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